Adolescencia e incredulidad

El o la adolescente duda de todo aquello que se le entrega como una certidumbre. Más aún cuando existe contradicción entre lo que se es y lo que se dice ser.

Las formas culturales de la conducta del adolescente son manifestación en gran medida de las contradicciones familiares y sociales en las que están inmersos, ya sea para negarlos o fomentarlos

Esto implica reconsiderar que los principios éticos y morales de un joven, desde mucho antes se vieron vulnerados o fortalecidos por la autoridad parental, dependiendo la estructura ideológica de los mismos y de la influencia intelectual y cultural a la que haya estado expuesto.

No se duda por ello que Incluso, lleguen a socavar los procesos de integración epistémica que se lleva a cabo en las instituciones escolares y los valores intrínsecos que son devengados y cultivas en la familia y en la sociedad.

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